¿Quién es Julia?
Un papel de cocina en el que un día se horneó algo que imprimió una huella. Sobre él, fragmentos de mapas que hablan de viajes, de caminos andados, de idas y venidas, de una vida entretejida de experiencias que dejan huella en el alma, en el cuerpo, en las venas.
Allí está ella, Julia bañista, que desde un espacio desestructurado y fragmentado con inicio en un tiempo ordenado, reglado pero sin sentido y marcado por un reloj sin manecillas, se lanza a otro espacio luminoso, amparado por un texto que rompe con lo fijado y que es leído de abajo arriba. Un cuadrado de luz donde los errores, las heridas, las roturas del papel, se remiendan zurcidas con hilo de amor dorado. Y en sus manos porta el tiempo, un fragmento de tiempo, de instantes troceados en los que detenerse para observar, desde todos los ángulos, la riqueza de la vida.
Julia tiene 46 años, está casada, es madre, hija, amante, amada, profesora universitaria, amable y sensible, amiga, vecina, impaciente, sencilla, andante sobre sus pies o sobre las ruedas de su bicicleta, a veces niña, otras adulta, impulsiva y reflexiva, marinera en sueños, exigente hasta la médula, a ratos insegura, temerosa, silenciosa, y un largo etcétera de debilidades y fortalezas, de cualidades y defectos propios de cualquier ser humano.
Ella busca ser feliz, sentirse en armonía con la vida, encontrar el camino que le lleve a sí misma, al lugar de donde viene y al que quiere regresar para ofrecer lo que tiene. Y cuando posa su mirada atenta a la experiencia que sucede en cada instante, cuando está presente en su aquí y ahora, se obran milagros cotidianos que pasan inadvertidos si seguimos los discursos de los pensamientos charlatanes, insidiosos y dolientes puestos en modo automático, compulsivo o reactivo… impidiéndonos estar con plena conciencia en cada uno de los momentos de la vida.
En este blog, Julia nos muestra instantáneas de su vida, captadas a cámara lenta y con el detalle de un microscopio multisensorial, tan habituales y sencillas como desayunar unas tostadas con tomate, darse un baño una mañana de verano, visitar a un familiar enfermo, observar lo que sucede cuando sopla el viento, ver el mar, escuchar, sentir un dolor, comer una pasa o simplemente respirar…
“La Mirada Atenta de Julia” es un blog que habla de Mindfulness en la vida cotidiana. Porque sólo cuando estamos con todos los sentidos atentos a lo que está ocurriendo en cada fragmento de tiempo, con una actitud curiosa, abierta, sin prejuicios y bondadosa, podemos decir que estamos viviendo de forma plena y de verdad la vida.
Que su mirada te haga sentir a ti amigo-amiga, más allá de las palabras, experiencias compartidas y te abra a nuevas formas de vivir, saltando hacia espacios luminosos detenidos en el tiempo.
María José Nácher Pons